Aquí la Sra. Elena de White nos explica la importancia qué existe entre los dos días el Sábado y el Domingo, no es que el día de reposo se haya recorrido sólo un día, se ha ido de guardar el 7mo día de la semana al 1er día de la semana, o sea, categóricamente retando lo ya establecido por Dios en los mandamientos.
Acá la Sra. Elena de White nos explica un poco el estado de los muertos y lo que tienen que pasar aquellos que no cuentan con la esperanza
La cuestión del sábado será el punto culminante del gran conflicto final en el cual todo el mundo tomará parte. Los hombres han honrado los principios de Satanás por encima de los principios que rigen los cielos. Han aceptado el falso día de descanso que Satanás ha exaltado como señal de su autoridad. Pero Dios ha puesto su sello sobre su requerimiento real. Ambos días de reposo llevan el nombre de su autor, una marca imborrable que demuestra la autoridad de cada uno. Es nuestra obra inducir a la gente a comprender esto. Debemos mostrarle que es de consecuencia vital llevar la marca del reino de Dios o la marca de la rebelión, porque se reconocen súbditos del reino cuya marca llevan. Dios nos ha llamado a enarbolar el estandarte de su sábado pisoteado. ¡Cuán importante es, pues, que nuestro ejemplo sea correcto en la observancia del sábado! (Joyas de los testimonios, t. 3, pp. 18, 19).
Acá la Sra. Elena de White nos explica un poco el estado de los muertos y lo que tienen que pasar aquellos que no cuentan con la esperanza
La Palabra de Dios, debidamente comprendida y aplicada, es una salvaguardia
contra el espiritismo. La teoría de un infierno que arde eternamente, predicada
desde el púlpito y presentada constantemente a la gente, representa una
injusticia para el carácter benevolente de Dios. Lo presenta como el mayor
tirano del universo. Este difundido dogma ha hecho volver a millares hacia el
universalismo, la incredulidad y el ateísmo. La Palabra de Dios es clara. Es una
recta cadena de verdad y resultará un ancla para aquellos que estén dispuestos a
recibirla, aún cuando hayan de sacrificar sus apreciadas fábulas. Ella los
salvará de los terribles engaños de estos tiempos peligrosos. Satanás ha
inducido a los predicadores de las diferentes iglesias a aferrarse tenazmente a
sus errores populares, como indujo a los judíos a aferrarse en su ceguera a sus
sacrificios y a crucificar a Cristo. El rechazo de la luz y la verdad deja a los
hombres cautivos, sujetos a los engaños de Satanás. Cuanto mayor sea la luz que
rechazan, tanto mayor será el poder del engaño y de las tinieblas que los
sobrecogerán (Testimonios para la iglesia, t. 1, p. 308).
Comentarios